El CO2 fraccionado es una tecnología de láser utilizada en dermatología y medicina estética para rejuvenecimiento cutáneo y tratamiento de diversas afecciones de la piel. Funciona emitiendo luz láser de dióxido de carbono (CO2) en pequeñas columnas o "fracciones" que penetran en la piel de manera controlada, creando microlesiones en las capas más profundas mientras deja intactas áreas de tejido sano entre ellas. Esto permite una cicatrización más rápida y reduce el tiempo de recuperación en comparación con los láseres CO2 tradicionales.

¿Cómo funciona?

El láser CO2 emite una longitud de onda que es absorbida por el agua presente en la piel, provocando la vaporización de las capas externas dañadas y estimulando la producción de colágeno en las capas más profundas. El colágeno nuevo ayuda a mejorar la textura de la piel, reduciendo arrugas, cicatrices, manchas y otras imperfecciones.

Aplicaciones principales:

1. Rejuvenecimiento facial: Mejora la apariencia de la piel envejecida, reduciendo arrugas y líneas finas.
2. Tratamiento de cicatrices: Es eficaz para tratar cicatrices de acné, cicatrices quirúrgicas y cicatrices traumáticas.
3. Corrección de manchas solares y melasma: Elimina manchas pigmentadas, mejorando el tono de la piel.
4. Estrías: Puede ayudar a disminuir la apariencia de las estrías.
5. Poros dilatados y textura irregular: Mejora la textura general de la piel al reducir el tamaño de los poros.

Beneficios del CO2 fraccionado:

1. Menor tiempo de recuperación: Al tratar solo fracciones de la piel, las áreas intactas ayudan a acelerar el proceso de curación.
2. Resultados duraderos: Estimula la producción de colágeno, lo que proporciona mejoras a largo plazo en la firmeza y elasticidad de la piel.
3. Personalizable: Los parámetros del láser (profundidad, densidad, energía) pueden ajustarse según las necesidades del paciente y el área a tratar.

El láser CO2 fraccionado es una opción popular debido a su eficacia y versatilidad en la mejora de la piel sin necesidad de cirugía invasiva.